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En el acto con motivo del Día Internacional de Conmemoración de las Víctimas del Holocausto, efectuado el martes en la sede del Senado, en Praga, se advirtió ante el peligro del creciente número de grupos extremistas en Europa que profesan el antisemitismo y abusan de la libertad y la democracia.

Con motivo del Día Internacional de las Víctimas del Holocausto, se efectuó un acto conmemorativo en la sede del Senado checo. En la reunión participaron, entre otros, el presidente del Senado, Přemysl Sobotka, y el presidente de la Federación de las Comunidades Judías de la República Checa, Jiří Daníček. Entre los invitados destacó Jaroslav Kraus, ex prisionero del campo de concentración de Auschwitz.

“Viejos comunistas vuelven a los concejos regionales”, “Metadona se podrá conseguir en farmacias checas” y “Alumnos de Bohemia del Norte recibirán clases por Internet”.

El escritor checo Arnošt Lustig recibió en Praga el Premio Franz Kafka, galardón otorgado desde 2001 por la asociación del mismo nombre a destacadas figuras de la literatura mundial.

En vísperas de la fiesta judía Yom Kipur, Día del Perdón, fueron colocadas en Praga los primeros diez adoquines que conmemoran a las víctimas del régimen nazi. El autor de la idea de recordar a los desaparecidos con una piedra introducida en la acera es el artista alemán Günter Demnig.

En la calle Jáchymova, en Praga, fue colocada este miércoles una piedra que conmemorará a las víctimas del holocausto de la localidad. La capital checa se sumó de esta manera al proyecto internacional denominado Stolpersteine, que consiste en incrustar en la acera piedras cubiertas con placas de latón en las que se graban los nombres de las personas que fueron expulsadas de sus hogares y asesinadas en los campos de concentración. Las piedras pueden encontrarse ya en varias ciudades de Alemania, Austria, Hungría y Holanda.

El 2 de agosto de 1943 estalló una rebelión de los prisioneros judíos en el campo de exterminio de Treblinka, instalado por los nazis al nordeste de la capital polaca Varsovia. Fue uno de los campos de muerte, construidos en el Este en el marco de la Operación Reinhard, diseñada para aniquilar a la población judía de Polonia, ocupada por Hitler en septiembre de 1939. En sus cámaras de gas fueron asesinados también judíos de otras partes de Europa:la Unión Soviética, los Balcanes, Alemania, Austria, el Protectorado de Bohemia y Moravia, Francia

En caso de buscar el nombre de Jan Jelínek en los libros de historia o en sitios Internet probablemente no encontremos información alguna. Sin embargo, Jan Jelínek salvó la vida a decenas de personas durante la Segunda Guerra Mundial.

La comunidad judía de Praga inauguró un nuevo Hogar de Asistencia Social en Hagibor. El establecimiento servirá como asilo para los ancianos que sobrevivieron el Holocausto.

En la estación de trenes de la ciudad de České Budějovice, Bohemia del Sur, los interesados pueden visitar vagones que recuerdan los traslados de judíos y gitanos a los campos de concentración nazis durante la Segunda Guerra Mundial. Los organizadores de la actividad persiguen acercar los horrores de ese período histórico especialmente a los jóvenes. “En semejantes trenes comenzó a cambiar la vida de muchos ciudadanos”, indicó el historiador Roman Hradecký. Recordó que uno de los primeros envíos de judíos a campos de concentración se inició en la ciudad eslovaca de Poprad, el 25 de marzo de 1942.