Un grupo de voluntarios de todo el mundo, de España, México, Turquía y
Corea del Sur, entre otros, ayudan a salvar el corazón de cera para Havel
de un peso total de 2.300 kilos. La obra de los artistas Roman Švejda y
Lukáš Gavlovský, que utilizó la cera de las velas encendidas en todo
el
país en conemoración del ex presidente checo fallecido en diciembre
pasado, se descompuso parcialmente debido a las temperaturas tropicales
que
azotaron últimamente el país. Los voluntarios ayudarán a instalar la
obra en los sótanos del castillo de Grabštejn donde permanecerá todo el
verano.