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Un convoy del Ejército de EE.UU. atravesará la República Checa en septiembre para participar en maniobras militares en Hungría. En la operación conocida como la ‘Marcha del Danubio’ tomarán parte más de 500 soldados y decenas de vehículos militares.

Unos 200 militares checos participará en los ejercicios de la Fuerza de Reacción Rápida de la OTAN que se efectuarán en Alemania en la segunda mitad de septiembre. El objetivo de las maniobras es ensayar la coordinación de los soldados de varios países en caso de una operación de ayuda a un país miembro de la OTAN que fuera blanco de un ataque enemigo. Los ejercicios denominados Strong Sword tendrán lugar del 14 de septiembre al 2 de octubre y, además de efectivos de la Fuerza de Reacción Rápida y de la Fuerza Conjunta de Muy Alta Disponibilidad de la OTAN, tomarán parte en ellos unos 2.000 soldados de Alemania, Noruega, Holanda y la República Checa.

Pilotos checos con aviones supersónicos JAS 39 Gripen abandonaron Islandia y regresaron a casa, después de haber custodiado durante varias semanas el espacio aéreo de ese país. A comienzos de esta semana visitó a los pilotos y técnicos checos en Islandia el ministro de Defensa, Martin Stropnický, quien apreció altamente el cumplimiento de la misión.

El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, visitará la República Checa el 9 de septiembre. El gobierno aprobó su visita este jueves, tras la invitación del primer ministro, Bohuslav Sobotka. Stoltenberg tratará en Praga la adaptación de la OTAN a las cambiantes condiciones de seguridad, así como el Plan de Acción Rápida de la organización, aprobado en la cumbre de Gales el año pasado.

Más de cuatro centenares de tanques, coches todo terreno y vehículos Pandur, además de unos 1.400 soldados de Chequia, participarán en Alemania en los ejercicios militares Allied Spirit II. Se trata de una de las maniobras más importantes organizadas por la OTAN este año. Los ejercicios, cuya parte práctica tendrá lugar del 15 al 24 de agosto, se efectuarán en el campo militar del municipio de Hohenfels, en Baviera y tomarán parte en ellos en total unos 4.500 soldados de países de la Alianza Noratlántica, así como de Georgia y Serbia. Las maniobras están bajo el mando del checo Josef Kopecký, jefe de la Séptima Brigada Mecanizada.

Cientos de militares estadounidenses con unos 100 vehículos atravesarán Chequia en su viaje hacia un entrenamiento que tendrá lugar en septiembre en Hungría. Los americanos pasarán en este país una noche, indicó el ministro de Defensa checo, Martin Stropnický, al agregar que los detalles del traslado se están concretando. El convoy estadounidense pasó en sentido contrario por la República Checa en primavera causando grandes polémicas entre la sociedad.

El estado del Ejército checo, el presupuesto anual de la Defensa nacional y los entrenamientos comunes de las fuerzas de respuesta rápida. Sobre estos temas ha debatido en Praga el Comandante Supremo de Transformación de la OTAN, Jean-Paul Paloméros, con el jefe del Estado Mayor checo, Josef Bečvář. Este jueves, Paloméros se reunirá con el viceministro de Defensa, Jakub Landovský, y visitará el Centro para la protección contra las armas de destrucción masiva, situado en Vyškov, al sureste de la República Checa.

La República Checa se empeñará por alcanzar que Montenegro sea invitado en el curso de este año todavía a ingresar en la OTAN. Así lo dijo el primer ministro checo, Bohuslav Sobotka, después de haber mantenido deliberaciones en Praga con su colega de Montenegro, Milo Djukanovich. Sobotka apuntó que Montenegro será el primer país después de un largo tiempo, que se adherirá a la OTAN. Djukanovich indicó por su parte que para Europa es muy importante crear una ‘zona de estabilidad’ en los Balcanes, en vista de que esta es una de las regiones más aprovechadas por los inmigrantes ilegales para entrar a Europa. Otro tema tratado por los primeros ministros de Chequia y Montenegro fue la ampliación de la colaboración económica y del intercambio comercial entre los dos países.

El democristiano Partido Popular anunció que sus miembros no viajarán a Rusia mientras el Kremlin mantenga su política desestabilizadora en Ucrania. Se trata, además, de una reacción a la decisión de Moscú de prohibir la entrada a la Federación Rusa a 89 políticos europeos.

A Rusia le serían suficientes dos días para ocupar militarmente los Estados Bálticos. Así lo declaró el general checo, Petr Pavel, en una conferencia de seguridad celebrada en Praga. Pavel dijo que los líderes políticos de la OTAN no son capaces de reaccionar con suficiente rapidez a situaciones inesperadas, y agregó que las medidas adoptadas por Europa en relación con las amenazas de Rusia y el Estado Islámico resultan ineficaces.