La simbólica Luz de Belén llegará a la catedral de San Vito en Praga.
De las manos de los scouts checos la recogerá el cardenal, Miroslav
Vlk. Hasta la Nochebuena los ciudadanos checos pueden llevarse una
llama de la Luz de Belén a sus hogares. La Luz de Belén estará situada
en Praga en el edificio de la Radiodifusión Checa, en el Palacio
Arzobispal y en la mayoría de los templos católicos capitalinos. La
llama, denominada Luz de la Amistad, se enciende en el lugar de
nacimiento de Jesucristo, en Belén, y viaja desde Israel en una
cajafuerte especial hasta Linz, Austria, donde surgió la idea original.
De esa ciudad, la Luz es llevada a 25 países del mundo, llegando así a
varias emisoras de radio, al Parlamento Europeo y a la sede de la ONU
en Nueva York.