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Miles de checos se ilusionaron con los anuncios de enormes rebajas en los grandes centros comerciales y en el primer día laboral del año irrumpieron masivamente en los comercios. En varias ciudades de la República Checa, la "fiebre consumista" causó un colapso de transporte vial.

Al mercado checo fue lanzado un libro sobre el belén de Trebechovice, declarado patrimonio cultural checo. El texto proporciona informaciones detalladas sobre su autor, el tallista aficionado Josef Probost, así como sobre el propio belén, compuesto por más de dos mil piezas talladas. El nacimiento mecánico, de siete metros de longitud, triunfó en la exposición mundial EXPO 1967 en Montreal. Un gran número de fotografías ofrece al lector la posibilidad de adquirir una buena imagen sobre esta excepcional obra del arte popular checo.

Poco después de que concluyera la ola de compras navideñas, los ciudadanos checos invadieron nuevamente los comercios. Grandes redes comerciales en la República Checa anunciaron sus rebajas antes de lo acostumbrado en años anteriores, copiando la tendencia de otros países europeos.

"Una defectuosa construcción de las casas, un elevado número de barrios de chabolas y la inexistencia de un sistema de advertencia- todas estas circunstancias convierten a los países pobres en lugares menos seguros", opina Hospodárské Noviny.

Un tiempo primaveral con temperaturas alrededor de cinco grados sobre cero acompañó este año las fiestas de Navidad en la República Checa. A pesar de que en estas latitudes la Navidad no estuvo acompañada por las acostumbradas blancas capas de nieve, nada perdió de su encanto.

¿No tienen a veces, amigos, ganas de trasladarse al pasado cuando, como dicen nuestros abuelos, la vida era más tranquila, la gente se quería, los niños obedecían a sus padres, en invierno había montones de nieve, por lo menos en estas latitudes ...? Pues, a mí, me gustaría viajar unos cien, ciento cincuenta años atrás y pasar estas fiestas navideñas en una aldea de Valaquia, región al pie de la sierra de Beskydy en Moravia Oriental.

Hola, amigos estudiantes de checo. En víspera de la Navidad les invitamos al centro de Praga para palpar el "ambiente navideño" que reina en la capital checa.

La portada del rotativo Lidové Noviny señala que los checos contrajeron deudas gigantescas antes de las fiestas navideñas. La cifra total para el mes de diciembre ha alcanzado por el momento unas 15 mil millones de coronas, equivalentes a 500 millones de euros.

Los capellanes castrenses pasarán unas fiestas navideñas más tranquilas. Tras la reciente profesionalización del Ejército de la República Checa, los reclutas abandonan los cuarteles que solían compartir con los capellanes durante la Navidad. Los sacerdotes ayudaban a los soldados a superar el mal humor causado por la obligación de estar en servicio. No obstante, los capellanes tomarán parte este año en numerosos conciertos y otras actividades culturales.

Los checos preservan las típicas tradiciones de las Pascuas de Navidad. Pocos se pueden imaginar la cena de Nochebuena sin una carpa empanizada, acompañada con ensaladilla rusa. En casi todos los hogares checos se puede percibir en esta temporada del año un aroma a vainilla y canela. Resulta que la mayoría de las amas de casa prepara las típicas galletas navideñas.