En 120 millones de coronas, unos 4 millones de euros, se estiman los
daños que las inundaciones han causado en la sede de la Filarmónica
Checa, el palacio Rudolfinum, ubicado en la capital checa en la orilla
derecha del río Vltava. Las aguas anegaron el archivo, los vestuarios,
instalaciones de ventilación y el grupo electrógeno y pusieron fuera de
funcionamiento la centralita del edificio.