El histórico reloj astronómico, situado en la Plaza de la Ciudad Vieja
de Praga, sufrió un serio defecto este domingo, según informó el portal
Tn.cz. Las campanas del reloj no paraban de sonar y las figuras de los
apóstoles que suelen asomarse cada hora en punto por unas ventanillas,
circulaban sin parar. Según señaló el maestro relojero Petr Skála,
todo
se debió a la ruptura de un pequeño tornillo de unos seis milímetros de
diámetro. Gracias a la intervención de Skála, el funcionamiento del
valioso mecanismo volvió pronto a la normalidad. El reloj astronómico de
Praga data del siglo XV.