Diplomáticos checos advirtieron que de continuar la reducción del
presupuesto para el sector de Defensa, el país se verá expuesto a un
serio peligro. Una situación similar se registra también en los demás
países de la OTAN, lo que el Embajador checo en ese organismo
internacional, Martin Povejšil, considera grave. Jiří Šedivý, quien
reemplazará a Povejšil en el cargo en septiembre, criticó igualmente la
planificada retirada de los soldados checos de Afganistán y dijo que si
seguirán los recortes, el sistema de seguridad nacional entrará en
crisis, lo que podría amenazar al país. La Alianza Noratlántica
recomienda a sus miembros destinar un 2% aproximadamente de su PIB a la
defensa, lo que Chequia no cumple. El año pasado sus gastos en este
sector
llegaron al 1,15% del PIB.