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La ciudad de Zlín este miércoles rendirá homenaje al estudiante Jan Palach que se quemó a lo bonzo hace 48 años en protesta contra la ocupación soviética de Checoslovaquia. En una de las plazas céntricas de la urbe, la gente encenderá velas que crearán una cadena luminosa de hasta medio kilómetro de longitud, según esperan los organizadores. Palach se prendió fuego el 16 de enero de 1969 y sucumbió a las quemaduras en el hospital tres días más tarde.

El estudiante checo Jan Palach se autoinmoló hace 48 años para protestar por la invasión soviética de Checoslovaquia. Con su sacrificio quiso despertar a la nación, que bajo la bota invasora había empezado a caer en una profunda indiferencia que le alejaba de los ideales democráticos y de libertad.

Unos veinte estudiantes universitarios iniciarán una huelga de hambre en cadena a partir de medianoche de este lunes y hasta el 25 de enero. De esta manera quieren rendir homenaje a Jan Palach y Jan Zajíc, estudiantes checos que en 1969 se autoinmolaron en protesta contra la ocupación de la entonces Checoslovaquia por las tropas soviéticas. “Consideramos ésta una forma adecuada para expresar nuestro reconocimiento a Palach, Zajíc y a todos los combatientes por la libertad y la democracia, y para mantener vivo su legado”, recalcó Jan Deutsch, uno de los participantes en la huelga de hambre. Otras actividades se efectuarán el 19 de enero, fecha de la muerte de Palach en un hospital de Praga, y el 25 de enero, fecha de su funeral.

Chequia conmemora este lunes el 48 aniversario de la autoinmolación del estudiante Jan Palach en protesta contra la ocupación del país por las tropas soviéticas en 1968. El primer acto recordatorio se efectuó en horas de la mañana junto al monumento a Jan Palach situado frente al histórico edificio del Museo Nacional de Praga, en la céntrica Plaza Venceslao. El primer ministro, Bohuslav Sobotka, destacó en el encuentro que el acto heroico cometido por Palach forma parte importante de la historia checa, y que nunca debería ser olvidado.

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La ‘Casa de la Madre’ y la ‘Casa del Hijo’, una pareja de esculturas de metal, recuerdan en Praga desde este domingo la autoinmolación hace 47 años del estudiante Jan Palach, que se quemó vivo en protesta por la ocupación soviética de Checoslovaquia.

Un monumento en memoria de Jan Palach, el estudiante que se autoinmoló para protestar contra la apatía del pueblo tras la invasión soviética de 1968, fue inaugurado en Praga este sábado. El monumento del escultor norteamericano de origen checo John Hejduk fue instalado cerca de la plaza Jan Palach. La ceremonia contó con la presencia de miembros de la familia de Palach, el embajador estadounidense en la República Checa Andrew H. Shapiro y la alcalde mayor de Praga Adriana Krnáčová, entre otros.

Frente al Museo Nacional de Praga se recuerda este viernes al estudiante Jan Palach, quien se autoinmoló ahí en 1969 en protesta contra la ocupación de Checoslovaquia por las tropas del Pacto de Varsovia. Palach insistía en que la libertad hay que defenderla y luchar por ella y criticaba a los checos por su pasividad frente a los ocupantes. Por la tarde rendirán homenaje a Palach el ministro de Cultura, Daniel Herman y el director del Museo Nacional, Michal Lukeš. Este sábado, fecha del aniversario de la autoimolación de Palach, quien falleció días más tarde en un hospital de Praga, será develado un monumento al estudiante checo en el malecón de Aleš junto al río Moldava.

Una exposición de fotos del surgimiento y los trabajos de preparación de la prevista instalación del monumento a Jan Palach se inaugura este martes en la Facultad de Filosofía de la Universidad Carolina de Praga. La escultura, de John Hejduk, fallecido en 2000, será develada en el cercano Malecón Rašín el próximo 16 de enero, el día del 47º aniversario de la autoinmolación de Palach. El estudiante se suicidó en 1969 en protesta de la invasión de los países del bloque soviético a Checoslovaquia, donde pusieron fin a la intentona reformista conocida como Primavera de Praga.

Representantes de varias organizaciones cívicas checas organizaron para este domingo una marcha por Praga en homenaje a Jan Palach, estudiante que se quemó a lo bonzo en 1969 en protesta contra la ocupación de Checoslovaquia por las tropas del Pacto de Varsovia. Los participantes en la marcha colocaron una ofrenda floral en la tumba de Palach en el cementerio de Olšany y de allí, llevando velas encendidas en las manos, se dirigieron a la céntrica Plaza Venceslao donde el joven se autoinmoló hace 46 años y donde recuerda ese triste acontecimiento un monumento en el adoquinado junto al Museo Nacional. En horas de la noche el sacerdote Tomáš Halík oficiará una misa por Jan Palach en la iglesia del Santísimo Salvador, en Praga.