El bosque nativo de Boubín
Gracias a iniciativa del silvicultor Josef John en el siglo XIX se ha conservado la floresta virgen más conocida de Bohemia, la de Boubín, que se extiende en la ladera sur de la montaña homónima, situada en la sierra de Šumava, en el sudoeste de la República Checa. John convenció en 1858 al dueño de los bosques, el príncipe Schwarzenberg, de que en un área intacta, se decretara una reserva natural que permitiese dar a conocer a las futuras generaciones cómo era una floresta virgen centroeuropea. El núcleo más rigurosamente protegido del bosque nativo de Boubín ocupa una superficie de unas 50 hectáreas, en la que está prohibida la entrada a los turistas. La prohibición fue decretada a finales de los años 70 del siglo pasado. En aquella década cayó, derribado por un temporal, un legendario árbol, el Rey de las Píceas, de 440 años de edad. Los especialistas concluyeron que la caída del gigante de 52 metros se debió también a las multitudes de turistas que dañaron con sus pies las raíces del añoso árbol. Desde entonces el núcleo más conservado de la floresta virgen de Boubín está rodeado por una cerca.