El ex presidente checo, Václav Havel, fue uno de los parroquianos más
renombrados de la cafetería Slavia, un tradicional local praguense de
encuentro de artistas de diferentes sectores culturales. Café con absenta
es la bebida típica de este lugar, situado enfrente del Teatro Nacional,
con una vista maravillosa sobre el Castillo de Praga y el Puente de Carlos.