Hace 75 años, el 20 de noviembre de 1944, más de 280 aviones
estadounidenses bombardearon varias ciudades en Moravia y Silesia. El
ataque aéreo más devastador fue en Brno, que se cobró 410 vidas.
Afectadas fueron también las ciudades de Opava, Hodonín, Břeclav, Zlín,
Přerov y Kroměříž.
Ese día, 470 bombarderos estadounidenses partieron de una base del sur de
Italia con el fin de destruir refinerías de gasolina sintética en el sur
de Polonia. Sin embargo, debido al mal tiempo, dos grupos de asalto
recibieron instrucciones de atacar objetivos secundarios. Cerca de 700
ciudadanos checos murieron en los ataques.