Los que lanzaron huevos y otros objetos contra el presidente checo, Miloš
Zeman, el pasado 17 de noviembre durante su discurso en Praga, no
cometieron una infracción. Así lo decidió el Ayuntamiento de Praga 2,
que por lo tanto no sancionará a los que provocaron el incidente. Cientos
de personas abuchearon al mandatario en la revelación solemne de una placa
conmemorativa del 25 aniversario de la caída del régimen comunista
checoslovaco debido a sus posturas pro-rusas, sus declaraciones aduladoras
hacia el régimen chino, por un lado, y las palabras vulgares que utilizó
en una entrevista en la radiodifusión pública.